Las maravillosas características naturales del bambú lo convierten en una de las plantas más reconocibles del mundo. Su nombre también es muy interesante. Debido a su sonido y a su pronunciación uniforme en todo el mundo, muy pocas personas pueden oírlo y luego olvidarlo.

¿Y por qué “Bamboo Mamboo”?

Hay dos historias sobre el origen de la palabra BAMBÚ, y ambas provienen de Malasia.

La primera historia cuenta que la palabra BAMBÚ se formó combinando las palabras "mamboo", originaria del antiguo dravidiano, hablado principalmente por malayos, y "bamboes", usada e introducida en esa región del mundo por los colonos holandeses a finales del siglo XVI. Según esta historia, la palabra BAMBÚ se acuñó entre 1590 y 1600.

MAMBÚ + BAMBÚES =BAMBÚ

La segunda historia se remonta a un período aún anterior y dice que la palabra malaya original MAMBOO, de hecho, se pronunciaba BAMBOO y fue acuñada como onomatopeya para el sonido de los bambúes ardiendo.

Es decir, cuando el bambú se calienta, el aire caliente dentro de sus troncos huecos los expande y los hace estallar, lo que produce fuertes explosiones. Estas explosiones recuerdan al sonido "bam-bam", por lo que se cree que son la raíz del nombre de esta asombrosa planta.

Cualquiera de estas dos interesantes historias sea cierta, el hecho es que la singularidad del bambú y sus excelentes cualidades también se han transferido a su nombre.

La naturaleza utiliza todos los medios para que nunca la olvidemos, para que recordemos fácilmente lo que es valioso y lo que puede sernos de gran utilidad en cada período de nuestra vida.